martes, 4 de febrero de 2020

EL REFLEJO





            Me miro en el espejo y no me convence lo que veo. El paso de los años, los partos, los golpes de la vida han dejado demasiadas cicatrices. En mi reflejo no noto la fuerza de antaño. Aunque las curvas se mantienen, crecen demasiado para mi gusto. Noto cada vez más arrugas en el rostro y la turgencia de mis piernas tiene poco que ver con aquellas que me hacían volar cuando salía a correr. La gravedad no perdona. Por mucho que siga trabajando la musculatura y elasticidad a diario, cada vez me gusto menos. Sin embargo no puedo dejar de sonreír. Sé que eso también me provoca arrugas, pero esas no me preocupan demasiado. Ante mi tengo el reflejo de una mujer feliz.





 *********





     Le miro desde la cama. Esta plantada delante del espejo, completamente despeinada, haciendo muecas y observando su cuerpo descontenta. Sonrío. Esta preciosa. Es preciosa. No puedo imaginar una mirada más dulce ni una sonrisa más sincera. Admiro su cuerpo. La perfección de sus imperfecciones, la asimetría de formas imposibles que mis manos no se cansan de recorrer y se me dibuja en la cara una sonrisa bobalicona. Me siento afortunado, soy un hombre feliz.


35 comentarios:

  1. Me ha encantado! Ha habido momentos en los que se me ha puesto la piel de gallina. Muy chulo. 😊

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Kuki Loki!!! Siempre es bueno despertar sensaciones, sobretodo si son agradables!
      Un abrazo

      Eliminar
  2. Ojalá que las famosas líneas de expresión fueran siempre de felicidad.
    En este bello relato, la felicidad es compartida por los miembros de la pareja. Siempre que hay amor, hay dicha.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Casi siempre que hay amor hay dicha!! Aunque en el caso de los protas es evidente que sí.
      Un abrazo

      Eliminar
  3. Dos personas felices, que saben que lo son y que comparten la mutua felicidad. ¿Hay algo más deseable?
    Has escrito un relato precioso.
    Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Rosa!!! Siempre me ha resultado curiosa la forma de mirarnos al espejo. Nosotros normalmente escondemos una tripa que es evidente que está ahí y vosotros intentais sacarla cuando realmente no existe.
      Cuestión de puntos de vista!
      Un abrazo

      Eliminar
  4. Pura felicidad. Ojalá que dure para siempre. Se lo merecen.

    ResponderEliminar
  5. Ay David, David, eso es seguir prendado de esa mujer, más allá del costuras de pliegues y balanceos polludos. Eso es pasión de gavilanes, pordi....

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pordi? Te ha faltado empezar el comentario con un "holi"!!! Jajajajaja.
      A veces nos gustaría vernos como nos ven los demás, aunque nos cueste reconocer virtudes en nuestros reflejos...

      Eliminar
  6. Buenas, David.

    Una bonita historia de amor de dos personas felices. Me gusta como has enfocado los dos personajes, dándole a la mujer todo el protagonismo.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Siempre me ha resultado curiosa vuestra forma de ver vuestro cuerpo.
      Un saludo y bienvenida a mi embarcadero.

      Eliminar
  7. Ay! Qué bonito! Puro amor. Sencillo en la forma y muy hondo en el fondo. Fantástico, David.

    ResponderEliminar
  8. Hola David

    Eso es el amor!

    Gracias por un relato tan bonito, es como lo del príncipe azul pero de verdad.

    Enhorabuena, saludos y suerte

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hay algo más bonito que poder admirar un ser amado?
      Muchas gracias Paola. Un abrazo

      Eliminar
  9. Es muy difícil escribir la felicidad, sin embargo has logrado una historia preciosa y sencilla. Así no más, como el amor que dura y se transforma con los cuerpos.
    Mucha suerte. Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Una vez la sientes, no es tan difícil escribirla!! Lo difícil es prolongarla, jajajajaja
      Un abrazo.

      Eliminar
  10. Hola Paco! Soy Beri. Tu relato es muy bello, con un lenguaje sencillo y natural que va directo al corazón. Me parece muy interesante la técnica de los dos puntos de vista: dos reflejos distintos para una misma realidad. Felicidades y mucha suerte.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Beri! Soy David. Gracias por la visita y por disfrutar el relato, aunque no sea de Paco. :)

      Eliminar
    2. Perdona, David, que con tantos comentarios ya me hago un auténtico lío...(jeje)

      Eliminar
  11. Precioso tu relato, tan simple y tan bien trabajado; y tan profundo. Un abrazo, y buena suerte.

    ResponderEliminar
  12. Hola un relato donde la única guerra que se da es con aceptarse tal cual somos, sin importar las batallas que se han librado,sino las que hemos ganado. A veces, no nos aceptamos y eso es infelicidad .Es hermoso los sentimientos que expresa el hombre enamorado de ella y cómo la ves ,sin importar sus años o lo que ella se cuestiona. Buen relato para enaltecer el amor propio. Saludos desde Venezuela

    ResponderEliminar
  13. Corto pero intenso, buscando ir directo al corazón del lector sin demasiados aspavientos. Eso es el amor, en definitiva, aceptarse uno mismo y aceptar al otro. Bonito relato. Un saludo y suerte, David.

    ResponderEliminar
  14. Hola David, De nuevo nos encontramos por aquí.
    Así que esta vez nos regalas una historia a través del espejo. Pues eso es querer, amar la perfección de las imperfecciones, una frase contundente. Una perfecta definición del Amor con mayúsculas.

    ResponderEliminar
  15. Te ha quedado contundente el relato.
    Donde hay amor hay belleza.
    Un abrazo, compañero.

    ResponderEliminar
  16. Misma cosa, diferentes puntos de vista. Muy acertada, sobre todo la segunda parte. A veces, o depende de qué cosas, debemos ser duros o críticos con nosotros mismos, pero hay que saber cuándo no deberíanos.
    Me gustó mucho, David, mucha suerte y un abrazo.

    ResponderEliminar
  17. Precioso relato donde la belleza de la madurez es observada a través del espejo.Corto pero intenso. Suerte en el tintero. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  18. Un relato corto pero intenso, muy bien narrado, donde cada uno de los protagonistas reflexionan sobre lo mismo: la imagen y su reflejo. El título, con doble lectura, es acertado y resume bien la esencia de la historia. Mucha Suerte en El Tintero. Un abrazo, David.

    ResponderEliminar
  19. Hola, David. Has escrito lo que todos deseamos, sentirse plenos, felices, conformes con nuestras vidas y sobre todo, con nuestros sentimientos.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  20. Saludos David, que lindo y esperanzador relato, un hombre y una mujer felices. Éxitos y bendiciones!

    ResponderEliminar
  21. Solo puedo agradecerte el que hayas hecho este escrito. Transmite esperanza, sobre el amor, sobre la vida, sobre las personas. Me gusta.
    Me quedo de visita permanente en tu casa, si me aceptas, claro.
    El más grande de los éxitos para ti, David.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  22. No hay arrugas en el amor verdadero, ni debería haberlas en la felicidad. Precioso relato. Saludos y suerte en el Tintero.

    ResponderEliminar